Eva María Soriano, Directora del Departamento de Banca Patrimonial en Caja Rural de Aragón, repasa su trayectoria profesional en esta entrevista y destaca la importancia de la formación continua y la educación financiera de los clientes. Soriano cumple 25 años en la misma entidad donde ha pasado por diferentes responsabilidades y también en diversos puntos de la geografía aragonesa.
Sólo el 15% de los centros educativos imparten algún tipo de formación financiera.
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Entrevista a Eva María Soriano, antigua alumna de CESTE
Lleva más de 20 años en Caja Rural en diferentes responsabilidades, ¿qué valora más de su trabajo?
Lo que más valoro después de todos estos años son las relaciones personales que he ido generando a lo largo de esta trayectoria. El asesoramiento te ayuda a poder forjar vinculaciones personales y poder acompañar a los clientes en la toma de decisiones importantes a nivel de inversión, con la implicación que ello tiene en su planificación familiar. Al final las relaciones profesionales se convierten más en relaciones personales, en las que entran a formar parte los hijos y los nietos.
Ha pasado por la red comercial, por la banca personal y ahora dirige el departamento de banca patrimonial, ¿con qué se queda de cada puesto?
Desde mi primer destino en San Mateo de Gállego hasta llegar a la sede corporativa en el Coso zaragozano, he recorrido muchos kilómetros y he conocido a muchas personas que te ayudan a crecer profesional y personalmente. De la zona rural me quedo con la sencillez y el trato familiar de las personas de esas zonas que te abren las puertas de su economía y de sus casas.
De los once años al frente de la oficina de empresas me quedo con la fuerza y perseverancia de los empresarios que siempre están luchando por su empresa y por sus empleados. De esta última etapa liderando el departamento de Banca Patrimonial destaco la relación de servicio de nuestras oficinas y las relaciones con compañeros del sector, tanto del grupo rural como de gestoras o entidades con los que mantenemos muchos y buenos contactos.
El Licenciada en Administración y Dirección de Empresas y ha completado su formación con el programa EFA y un programa de la escuela de negocios CESTE, ¿siempre tuvo claro que lo suyo eran las finanzas?
Siempre me han gustado las matemáticas y estar en contacto con el público, por lo tanto, la combinación era fácil: Una carrera de números y que me permitiera poder ayudar y estar en contacto con la gente. A lo largo de estos años sí que tenía mayor interés por temas fiscales y entre ellos la planificación financiera.
Soy una defensora de la formación continua, y así se lo he trasladado a mis hijos.
La formación continua enriquece las capacidades y aptitudes de los trabajadores, de forma que son capaces de generar un mayor desarrollo profesional, mejorar la productividad, optimizar la gestión de tareas y en general aportar un valor añadido a la empresa.
¿Cómo ve la educación financiera de sus clientes? ¿Cree que las crisis sirven para elevar la cultura económica de la sociedad?
En las épocas de crisis es cuando más aprendemos todos y cuando más debemos acompañar a los clientes. La directiva MiFID ha ayudado a generar una mayor transparencia en los mercados y al mismo tiempo a facilitar más información al cliente sobre los productos de inversión que prestamos o comercializamos las entidades.
Pero a pesar de todo esto, las encuestas recogen que la cultura financiera sigue siendo una signatura pendiente. Se podría valorar impartir nociones básicas en las aulas, y a medida que avance el desarrollo educativo de los niños ir profundizando en este temario. Solamente el 15% de los centros educativos de nuestro país imparten algún tipo de formación financiera.
Una película, un libro y una canción.
Una película La Vida es Bella, un libro Terra Alta de Javier Cercas y la canción de Coldplay Viva la Vida.
El contenido ha sido extraído de la entrevista publicada en el portal Estrategias de Inversión (https://www.estrategiasdeinversion.com/)